Querido hermano:
Este año tengo el honor de poder celebrar por primera vez el día de nuestro aniversario como hermano mayor de nuestra corporación.
Quiero, en primer lugar, agradecer en nombre de la Junta de Gobierno a todos los hermanos que desde los comienzos, nada fáciles, hace 31 años han hecho posible que hoy podamos ser la Hermandad que somos, sin perder el carácter y la impronta de sus raíces.
Como vecino y feligrés de la parroquia de San Emilio desde mi nacimiento, siempre he tenido presente a la Hermandad. He podido vivir, primero desde fuera y posteriormente desde dentro, el transcurrir de la misma durante estos años. Desde ir cada Domingo de Ramos al colegio para ver salir a la cofradía de mi barrio, a partir desde mi casa revestido de nazareno para hacer pública manifestación de fe con mi Hermandad.
Debemos pues sentirnos orgullosos de la evolución conseguida. De salir de una carpa del colegio a salir de nuestra casa de hermandad. De salir con el paso de misterio en sus inicios a salir con el mismo prácticamente acabado. Haber tenido el honor de haber participado en el Vía Crucis de la JMJ en Madrid en presencia de Benedicto XVI. La aprobación de proyecto de palio y el comienzo de su ejecución….
El camino recorrido nos debe de dar impulso para mirar al futuro y seguir con la trayectoria. Fijándonos, no como metas , más bien como continuación, hacer realidad proyectos ilusionantes como la salida de María Santísima del Dulce Nombre en 2019, con todo el esfuerzo ello requiere, consiguiendo que cada vez tanto los hermanos como aquellas personas que hoy nos ven desde la acera, nos vean como verdadero ejemplo de Hermandad, y se sientan en su casa.
Felicito a todos los hermanos en el día de nuestro 31 aniversario
Que Jesús Despojado y su Madre del Dulce Nombre nos sigan dando verdadero ejemplo y aliento para continuar el camino.
Carlos Castillo Gómez
Hermano Mayor